domingo, 15 de diciembre de 2013

La dracma perdida

Una mujer tenía cien dracmas, se le perdió una, entonces encendió la lámpara y empezó a barrer, buscó y buscó hasta que la encontró, entonces llamó a sus amigas y vecinas para festejar, del mismo modo habrá alegría en el Cielo por un pecador que se arrepiente.
Esas dracmas somos nosotros, el Señor las cuida y si nos perdemos en el camino de la vida,Él sale a buscarnos, porque nos ama infinitamente, tanto que no nos podemos dar cuenta con nuestro pobre intelecto.



Adrián Prunotto

No hay comentarios.:

Publicar un comentario